Leo es, junto a Tauro, una de las constelaciones más brillantes del Zodiaco. Aparece por el este a continuación de Cáncer, y precede a Virgo. Tiene al sur las constelaciones de la Hydra y el Cráter y al norte a las estrellas «apuntadoras» de la Osa Mayor. El Sol pasa por ella entre el 10 de agosto y el 16 de septiembre, y es entre los meses de febrero y junio cuando ofrece una mejor visión sobre el horizonte del este. A la hora de publicar este artículo (22 horas UTC del día 28 de marzo, medianoche en España), Zosma (Delta Leonis) efectuaba su tránsito por el sur, culminando a una altitud de 73 grados.

La constelación es la decimosegunda en tamaño del total de 88, pues abarca 947 grados cuadrados, la mayor parte de ellos en el hemisferio boreal, y está localizada sobre la eclíptica, como el resto de las zodiacales, por lo que pasan por ella el Sol, la Luna y los planetas. Regulus es ocultada frecuentemente por el satélite.

El asterismo de Leo representa a un león mirando hacia el oeste, con la cabeza y la melena formando un signo de interrogación al revés, formado por 6 estrellas, y cuyo punto es Regulus, la estrella más brillante. Este signo es también conocido como la hoz, por asemejarse su forma a ese instrumento de labranza. El resto del león, sus patas y su cola, se extiende hacia el este. Habrá sin embargo quienes no vean esta forma ni ninguna otra. Véase el ingenioso e interesante artículo  ¿De dónde [ rábanos ] sacan las constelaciones?

ESTRELLAS PRINCIPALES

Las estrellas más brillantes de Leo son, por este orden, Regulus, Denebola, Zosma y Algieba, cuyas ubicaciones dentro de la constelación vemos en la siguiente imagen:

Regulus (Alpha Leonis)

Regulus (el pequeño rey) o Régulo, llamada Cor Leonis por Copérnico, es la estrella principal de la Constelación de Leo. Se trata de un sistema estelar cuádruple cuya componente principal, Regulus A, es una estrella blanco-azulada, de tipo espectral B7, que se encuentra, como nuestro Sol, en la secuencia principal, lo que significa que aún está en la fase de fusión nuclear de hidrógeno en helio, de donde proviene su energía. Tiene una magnitud de +1.35 y está a una distancia de 77 años-luz del Sistema Solar. Tiene una compañera anaranjada, una K1 con magnitud 8.12, que está separada cerca de tres minutos de arco de la estrella principal.

Denébola (Beta Leonis)

Está situada en la cola del León, lo que justifica su nombre (del árabe Dhanab, cola, como ocurre con Deneb en el Cisne, o Deneb Algenib en Capricornio). Es una estrella blanca de tipo A3, distante 36 años-luz de la Tierra y con una magnitud de +2.14. Posee también una compañera anaranjada, aunque muy tenue, de magnitud +15.7.

Algieba (Gamma Leonis)

La tercera estrella más brillante de Leo es, quizás, la más interesante. Aquí se encuentra el punto radiante de las Leónidas, importante lluvia de estrellas del mes de noviembre (en la imagen, año 2002), y se trata además de una preciosa doble resoluble con ayuda de telescopios de aficionado. La estrella principal es una gigante rojo-anaranjada de tipo espectral K0 y magnitud visual +2.21, que se encuentra acompañada, a 4.5″ de arco por una gigante amarilla tipo G7, de +3.8 de magnitud. El sistema orbita una alrededor de la otra, a 125 años-luz de nosotros.

Zosma (Delta Leonis)

Estrella blanca tipo A4 de la secuencia principal, o sea, que aún transforma el hidrógeno en helio, como Régulo o nuestro Sol. Su magnitud visual es de +2.56 y está a unos 58 años-luz de nosotros.

PRINCIPALES OBJETOS DE CIELO PROFUNDO

Son varias las decenas de objetos de Cielo Profundo, principalmente galaxias, presentes en la Constelación de Leo, debido a su proximidad a las constelaciones de Coma Berenice y Virgo, verdaderos «nidos» de este tipo de astros. Me limitaré por tanto a algunos de las más luminosos, prestando especial atención a los incluídos en el Catálogo Messier.

M66 o NGC3627

Galaxia espiral barrada, distante unos 36 millones de años-luz, perteneciente al llamado Triplete de Leo junto con M65 y NGC3628. Es la galaxia más brillante de Leo, con magnitud 8.9 y dimensiones aparentes de 9´ por 4´ de arco. Sus brazos espirales están deformados, debido probablemente a la interacción gravitacional con sus vecinas de triplete. Presenta una prominente protuberancia central.

NGC2903

Galaxia espiral barrada, muy extensa y luminosa, de novena magnitud, muy parecida a la Vía Láctea, aunque algo menor. Está a una distancia de 20.5 millones de años-luz, y es sorprendente su ausencia del catálogo de Charles Messier. Es posible observarla con pequeños telescopios para aficionados y ofrece un bellísimo y magnífico aspecto. Dimensiones aparentes: 12´x 6´minutos de arco.

M96 o NGC3368

Otra espiral barrada, con un centro fuertemente condensado. De magnitud 9.3, es el miembro más brillante del llamado Grupo de galaxias Leo I, que incluye también a la espiral M95 y la elíptica M105. Su distancia a nosotros se calcula en unos 41 millones de años-luz. Tiene un tamaño aparente de 8´ x 5´ de arco. Junto a M95, se encuentran a partir de Regulus, a unos 9 grados de esta estrella.

M105 o NGC 3379

Es la galaxia elíptica más brillante del Grupo de galaxias Leo I, a una distancia de 38 millones de años-luz y a menudo se toma como una típica representante de las galaxias elípticas, por la uniformidad de su color. Su tamaño aparente aproximado es de 5.3´ por casi 5´ de arco. Tiene una magnitud de 9.3. Estudios basados en datos proporcionados por el Telescopio Espacial Hubble sugieren la presencia en el centro de esta galaxia de un agujero negro de 50 millones de veces la masa del Sol.

M65 o NGC3623

Galaxia espiral barrada en el Triplete de Leo. Aunque está muy junta a sus vecinas, tiene el aspecto de una espiral sin influencias gravitacionales. Magnitud de 9.3 y tamaño aparente de 9´ por 2.3´de arco. Con un telescopio, se puede ver en el mismo campo de visión que M66 y NGC3628 y se sitúa a una distancia aproximada de 35 millones de años-luz.

M95 o NGC3351

Galaxia espiral barrada del Grupo de Galaxias Leo I. Con magnitud de 9.7 y tamaño angular aparente de 7.3 x 4.4 minutos de arco. Sus brazos son casi circulares y es bastante luminosa. Se puede encontrar en el centro de la constelación, junto a M96, a unos 9 grados de Regulus, como ya se dijo al describir esta última galaxia. Está a una distancia de 38 años-luz del Sistema Solar.

MITOLOGÍA

Tras recobrar la cordura, el primer trabajo que le impuso a Hércules el rey Euristeo de Tirinto fue exterminar la fiera que asolaba Nemea: un enorme león de piel a prueba de hierro, bronce y piedra. Heracles lo encontró en el monte Treto. Apuntó con su arco y disparó todas sus flechas pero rebotaban en la espesa piel del animal. Lo intentó con su espada, que se dobló como el plomo. Entonces, al acercarse, le propinó un terrible golpe. El león acusó el daño y retrocedió refugiándose en su cueva. Heracles entró en ella y viendo que era inmune a todas las armas, después de un largo combate lo estranguló con sus propias manos. Después de desollarlo se cubrió con su piel que en lo sucesivo utilizó como armadura. La imagen corresponde al lienzo de Zurbarán Hércules lucha contra el león de Nemea, de 1.634 (Museo del Prado, Madrid).

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